Encuentro en Andalucía con miles de hermanos con sus respectivos Obispos

Alrededor de 15.000 hermanos de toda Andalucía y Melilla, participaron en el mes de mayo de 2014 en el encuentro “Las Dos Orillas”, organizado por los iniciadores del Camino Neocatecumenal y que tuvo lugar en la localidad gaditana de Alcalá de los Gazules. 

Fue en Sevilla, Andalucía, donde llegaron los primeros catequistas itinerantes que salieron de Madrid tras la primera convivencia de itinerantes celebrada en Fuentes a finales de los años 60. Hoy en Andalucía hay cientos de comunidades en decenas de parroquias y los Obispos han abierto en la zona 4 Seminarios Redemptoris Mater.

El encuentro fue presidido por el Obispo de Cádiz y Ceuta, Mons. D. Rafael Zornoza Boy, que estuvo acompañado del obispo de Asidonia-Jerez, Mons. D. José Mazuelos; el obispo de Córdoba, Mons. D. Demetrio Fernández; el obispo de Huelva, Mons D. José Vilaplana, el obispo auxiliar de Sevilla, Mons. D. Santiago Gómez Sierra, y el arzobispo de Granada, Mons. D. Francisco Javier Martínez del que se da la curiosa circunstancia que Kiko fue profesor suyo de dibujo en Madrid en el barrio de Argüelles cuando era un niño, antes de que Kiko fuera a las barracas de Palomeras.

Este encuentro es el primero de una serie que se realizaron en otros lugares de España, tales como Valencia o Santiago de Compostela, y que llegaron a congregar a casi 80.000 hermanos. Este primer encuentro en Andalucía congregó a más de 15.000 personas venidas desde todas las diócesis andaluzas, así como desde Extremadura, Sur de Portugal y Canarias, y contó con la presencia de dos de los responsables internacionales del Camino Neocatecumenal, Kiko Argüello y Mario Pezzi, pues Carmen Hernández, tercer miembro del equipo, se tuvo que ausentar por motivos de salud.

Alrededor de 200 jóvenes y 100 familias numerosas se pusieron a disposición para la evangelización de Asia, que en palabras de San Juan Pablo II debe centrarse la evangelización del Tercer Milenio.

En estos últimos años Andalucía ha sido un semillero de vocaciones para el Camino Neocatecumenal, gracias también al apoyo decidido y firme de todos los Obispos de la región, que han guiado y seguido de cerca el desarrollo y crecimiento de las comunidades neocatecumenales en sus diócesis, en plena comunión con los distintos equipos de catequistas, que, a pesar de las dificultades y contrariedades propias de la misión, han sabido entender que el Camino era un itinerario de iniciación cristiana válido para el momento actual, y prueba de ello han sido los cuatro Seminarios Redemptoris Mater que se han erigido en los últimos años para formar presbíteros para la nueva evangelización.