domingo, 5 de mayo de 2019

San Juan Pablo II y el nacimiento de lo que será la primera experiencia de Seminario Redemptoris Mater del mundo en el Perú

Han pasado más de 30 años de que naciera lo que actualmente sería el primer Seminario Redemptoris Mater del mundo, un tipo de Seminario diocesano, misionero e internacional que nació como un proyecto embrionarios que fue auspiciado e impulsado por San Juan Pablo II en el 1985 tras su visita al Perú.

El presente estudio tiene como objetivo no sólo narrar la historia de lo que finalmente fuera el Seminario Redemptoris Mater, sino además, y sobre todo, documentar la obra de la Iglesia, expresada en un carisma concreto que es el Camino Neocatecumenal en esta parte del mundo, más concretamente en la Diócesis del Callao, en Perú.




Comenzó con un trabajo de clase del curso de Historia de la Iglesia y se han tenido en cuenta varias de las entrevistas en radio y TV a protagonistas como el P. Antonio Garciandía y Monseñor José Luis del Palacio, así como el testimonio de la familia en misión de Josep Castells Roca y María Mercedes Prad. En todo momento, he contado con la iniciativa y acompañamiento del P. Antonio César Molinero. También se ha contado con la revisión de Monseñor José Luis del Palacio. 

Ojalá que los presentes apuntes incentiven en los lectores a una investigación sistemática que se concrete en monografías, tesis, publicaciones.


El P. Raniero Cantalamessa OFMCap, predicador de la Casa Pontificia, en su Segunda prédica de Adviento, 14 de diciembre de 2012 concluye de modo contundente que el mayor fruto del Concilio Vaticano II lo encontramos en los movimientos eclesiales.

"Nos preguntamos: ¿de dónde ha pasado esta imagen de Iglesia de los documentos a la vida? ¿Dónde ha tomado «carne y sangre? ¿Dónde se vive la vida cristiana según «la ley del Espíritu», con alegría y convicción, por atracción y no por coacción? ¿Dónde se tiene la palabra de Dios en gran honor, se manifiestan los carismas y es más sentida el ansia por una nueva evangelización y por la unidad de los cristianos?..¡en los movimientos eclesiales!... Juan Pablo II veía en estos movimientos y comunidades parroquiales vivas «los signos de una nueva primavera de la Iglesia» (Novo millennio ineunte, 46). En el mismo sentido se ha expresado, en varias ocasiones, el papa Benedicto XVI. En la homilía de la Misa crismal del Jueves Santo de 2012 dijo: «Mirando a la historia de la época post-conciliar, se puede reconocer la dinámica de la verdadera renovación, que frecuentemente ha adquirido formas inesperadas en momentos llenos de vida y que hace casi tangible la inagotable vivacidad de la Iglesia, la presencia y la acción eficaz del Espíritu Santo». (Zenit, 14-XII-2012)


La puesta en práctica del Concilio Vaticano II fue la razón por la que el pasado 26 de junio del 2013 Kiko Argüello –iniciador del Camino- fue investido doctor honoris causa en Sagrada Teología por la Universidad Católica Juan Pablo II de Lublín (Polonia) Según el centro de estudios, ha seguido 'atentamente las indicaciones del Concilio Vaticano II, reconduciendo a los cristianos alejados de la comunidad eclesial a las fuentes de la fe que brotan de la Biblia y de la Liturgia'. Durante el Itinerario Neocatecumenal son formados en el encuentro con Jesucristo cada día con la Palabra de Dios y la Tradición de la Iglesia Además, subraya que el Camino Neocatecumenal 'prepara la missio ad gentes; interviene activamente a fin de que el cristianismo y el judaísmo se acerquen el uno al otro y defiende los valores de la vida y de la dignidad del hombre, del matrimonio y de la familia cristiana"[2].

Aunque el Camino Neocatecumental no es propiamente un "movimiento" sino un «itinerario de iniciación cristiana posterior al bautismo o para recibir este sacramento» lo cierto es que desde 1964 en que fueron aprobadas en Madrid por el entonces Arzobispo Casimiro Morcillo las comunidades, están difundidas en los cinco continentes, aportando nueva vitalidad a las parroquias, impulso misionero y frutos de conversión que brotan del testimonio de los itinerantes y, últimamente, de la obra de las familias que evangelizan en zonas descristianizadas de Europa y del mundo entero; vocaciones a la vida religiosa y al presbiterado y el nacimiento de Colegios diocesanos de formación al presbiterado para la nueva evangelización", como el Redemptoris Mater de Roma (Carta de Juan Pablo II al Cardenal Paul Josep Cordes, 30 de agosto de 1990).

Como dice Jesús en el Evangelio "por sus frutos, los conoceréis" (Mt 7,20). Después de más de 25 años de vida en La Punta-Callao, queremos presentar la realidad de uno de ellos, el Seminario Redemptoris Mater, inicialmente denominado "Juan Pablo II", también porque surgió con la llamada vocacional hecha por Kiko Argüello, Carmen y P. Mario el 5 de febrero de 1985 y también por contar en todo momento con su inspiración, apoyo, protección.

2. LOS SEMINARIOS "REDEMPTORIS MATER" EN EL CORAZÓN DEL "CAMINO"

Estos seminarios son uno de los frutos más importantes de la renovación postconciliar. Una realidad, completamente nueva, deseada por el Concilio Vaticano II que en la Presbyterorum Ordinis indica: Recuerden, pues, los Presbíteros que deben llevar atravesada en su corazón la solicitud por todas las Iglesias. Por tanto, los presbíteros de aquella diócesis que son más ricas en abundancia de vocaciones, muéstrense de buen grado dispuestos, a ejercer su ministerio en regiones, misiones u obras que sufren escasez de clero. Así, pues, para este fin pueden constituirse algunos Seminarios Internacionales, en los que puedan ser incardinados los presbíteros, según normas que se establecerán para cada uno de los casos y salvos siempre los derechos de los Ordinarios del lugar, para bien común de toda la Iglesia (PO, 10).

Como se reconoce claramente en la "nota histórica" de la página oficial del Camino, deben su nacimiento y crecimiento "a la valentía y al impulso misionero del Papa Juan Pablo II y de las familias en misión, casi todas con muchos hijos, cuyo testimonio de fe ha sido fundamental para la reevangelización y la formación de nuevas parroquias"[3]. La urgencia de abrir Seminarios para formar esos Presbíteros que pudiesen hacerse cargo de las nuevas parroquias que las familias preparaban se constata en todas las latitudes, particularmente en nuestro caso peruano.

En 1991, el Papa Juan Pablo II estableció la Comisión Inter-congregacional para tratar la grave escasez de sacerdotes en muchas partes del mundo, y reconoció: "Esta idea del Concilio se ha aplicado en los Seminarios Redemptoris Mater, que preparan a presbíteros para la nueva evangelización, según el programa del Camino Neocatecumenal... pudiendo realizar así una forma nueva del ministerio: el misionero diocesano." (L' Osservatore Romano, la Edición italiana, 15.3.91).
Las características de los Seminarios Redemptoris Mater se pueden resumir en cuatro aspectos fundamentales: Diocesaneidad, Misionariedad, Internacionalidad y Camino Neocatecumenal.

Los Seminarios "Redemptoris Mater" son diocesanos: o sea, son erigidos por los Obispos diocesanos de acuerdo con el Equipo Responsable internacional del Camino Neocatecumenal, y se rigen por las normas vigentes para la formación y la incardinación de los clérigos diocesanos.

Como expresa los Estatutos y la Regla de Vida, los Seminarios Redemptoris Mater no son seminarios propiamente del Camino Neocatecumenal, sino que son verdaderos Seminarios diocesanos que dependen del Obispo. Los estudiantes en dichos colegios reciben la misma formación teológica que los otros seminaristas de la diócesis. Durante un año realizan el trabajo pastoral en las parroquias como diáconos y dos años más en la diócesis como presbíteros, antes de que el Obispo los pueda mandar en misión. Pero si el Obispo tiene la necesidad de ellos en su diócesis, puede incorporarlos donde desea, dado que son ordenados sin ninguna condición previa. Son misioneros, esto es, los presbíteros formados están disponibles para ser enviados por el Obispo a cualquier parte del mundo. Son internacionales ya que los seminaristas provienen de países y continentes diversos, sea como signo concreto de la misionariedad, sea como signo de disponibilidad a ser enviados a cualquier parte. Están a disposición de todo el mundo y en el servicio de la Iglesia. La experiencia ha mostrado que, combinar la iniciación a la vida cristiana – el Camino Neocatecumenal - con la formación del presbítero, es una ayuda magnífica para el desarrollo psicológico, afectivo y humano de los candidatos.

Antes que presbíteros ellos son cristianos, y en el camino de la fe ellos aprenden la oración, la obediencia, el sentido de la Cruz, para estar en comunión, etc...) Sobre todo, es una ayuda para unir la misión con la parroquia, ya que el Camino Neocatecumenal es un tiempo de formación que termina en la parroquia, en donde, de forma adulta, viven las comunidades la misión en unión con el Párroco y con el Obispo. De hecho, la característica más significativa de estos seminarios es su relación con el Camino Neocatecumenal, es decir, con un itinerario de maduración hacia una fe adulta, que prepara y suscita las vocaciones en muchos jóvenes antes del ingreso en el Seminario, que les acompaña en el tiempo de formación, y ordenados Presbíteros, continúa sosteniéndoles en su formación permanente. El Camino Neocatecumenal se convierte también en un medio de evangelización para los alejados, en un instrumento de la "implantatio ecclesiae" por medio de familias que acompañan a los presbíteros y les ayudan en su misión:[4]

§ 3. Los Seminarios diocesanos y misioneros "Redemptoris Mater" son erigidos por los Obispos diocesanos, de acuerdo con el Equipo Responsable internacional del Camino, y se rigen según las normas vigentes para la formación y incardinación de los clérigos diocesanos[5] y según estatutos propios, de conformidad con la Ratio fundamentalis institutionis sacerdotalis.[6] En ellos los candidatos al sacerdocio encuentran en la participación en el Camino Neocatecumenal un elemento específico y básico del iter formativo y, al mismo tiempo, son preparados a la «genuina opción presbiteral de servicio al entero Pueblo de Dios, en la comunión fraterna del presbiterio».[7]§ 4. Compete al Obispo diocesano nombrar, tras presentación del Equipo Responsable internacional del Camino, al Rector y a los demás superiores y educadores de los Seminarios diocesanos y misioneros "Redemptoris Mater". El Rector, en nombre del Obispo y en estrecho vínculo con él, supervisa los estudios de los seminaristas y su itinerario formativo, y se asegura de la idoneidad de los candidatos al sacerdocio.[8]

El primer Seminario Redemptoris Mater nace en la década de los años 80, momento crucial en el que los iniciadores del Camino Neocatecumenal, Carmen, Kiko y el Padre Mario, viendo la falta de Presbíteros que acompañarán a los equipos Itinerantes y familias en misión llevando la buena nueva de Jesucristo a todos los rincones del mundo, presentan a su Santidad Juan Pablo II, la idea de crear un seminario "Diocesano" pero "Misionero", que haga suyo el llamado universal de la Iglesia, en la Diócesis de Roma. (http://www.redemptorismaternamur.com/es-que%20son%20los%20seminarios.htm). Este acontecimiento avalado por Su Santidad, cuenta hoy con más de 105 seminarios en los cinco continentes del mundo; en algunos lugares, nunca hubo un seminario católico hasta la creación de los "Redemptoris mater". Hoy, podemos afirmar que estos seminarios son auténticos semilleros de presbíteros y el corazón de la audaz y nueva evangelización del Camino Neocatecumenal



3. NACE UN SEMINARIO EN PERÚ… UNA NUEVA REALIDAD PARA LA IGLESIA


En 1985 Su Santidad San Juan Pablo II visitó el Perú. Como fruto de dicha visita, los iniciadores del Camino Neocatecumenal, Kiko Argüello, Carmen Hernández y el P. Mario Pezzi, hicieron una llamada vocacional a los jóvenes pertenecientes a estas comunidades en el Perú. Se ofrecieron más de 100 jóvenes para prepararse al presbiterado. En una carta con fecha del 15 de febrero de 1985, el entonces Obispo de la diócesis del Callao, Mons. Ricardo Durand, se dirige a los Padres José Luis del Palacio y Antonio Garciandía, para excusarse por su ausencia a la ordenación presbiteral del mismo José Luis del Palacio. En la misma, Mons. Durand expresa su alegría porque, en un encuentro con 5.000 jóvenes, en la carpa del Hotel Crillón, y en el que estuvieron presentes Mons. Javier Ariz y Mons. Augusto Beuzeville, 53 jóvenes dieron su disponibilidad para ingresar al Seminario.

Notifica también que según le ha informado el Cardenal arzobispo de Lima, Juan Landázuri, hay ya 100 jóvenes -en la zona de Santa Rosa - Balneario, dispuestos a servir a la Iglesia como sacerdotes. Monseñor Durand añade una deliciosa nota: "Con tu ordenación (José Luis) se han entusiasmado. Ojalá tengan perseverancia, ya que la mies es mucha y los operarios son pocos".

En otra carta fechada el 20 de junio de 1985, Mons. Durand manifiesta su conformidad con los cursos acelerados que realizan los seminaristas del Camino Neocatecumenal para luego poder ingresar a la Facultad de Teología Santo Toribio. Según lo expresado en la carta entendemos que, en este período, en el Centro Neocatecumenal se organiza la vida cotidiana según el siguiente esquema: Laudes y Santa Misa a las 7 am; desayuno y luego clases desde las 9 hasta las 13 hs. Aquí el Obispo sugiere que se realicen charlas de Espiritualidad sacerdotal, como tal vez el P. Antonio Garciandía ya lo viene haciendo. En esta misma carta está documentada la entrevista que mantuvo Mons. Durand con Jaime Palacios, Saleno, Francisco Iglesias, Richard Huamán y Oscar y Daniel Balcázar, quienes desde 1982 están estudiando en Santo Toribio. Vivían en el coro de la Iglesia de Nuestra Señora de la Cabeza (Rímac), hoy Centro Nacional Arquidiocesano de Lima, donde fueron visitados por el entonces Presidente de la República Fernando Belaunde. El plan llevado por el equipo integrado por el P. José Luis del Palacio y el P. Antonio Garciandía, respecto a la formación de los futuros sacerdotes de la diócesis del Callao, es bien acogido por el Señor Obispo, este plan se basaba en una formación eminentemente como itinerantes, primeramente con el Padre Alfonso Rakosy Palma, en la Parroquia Todos los Santos, luego, desde 1984, en la Iglesia Nuestra Señora de la Cabeza con los mismos José Luis y Antonio.

El 23 de marzo de 1986 llega una colaboración de 3.000 dólares de Adveniat que Mons. Durand había conseguido para la manutención de los seminaristas. Durante ese año todavía los candidatos al presbiterado recibían clases en la parroquia Nuestra Señora de la Cabeza y se reunían los domingos para compartir como estaban viviendo su formación, etc. En ese mismo año, Mons. Durand pide a Kiko Arguello, Carmen Hernández y al Padre Mario Pezzi, el envío de formadores para este nuevo seminario, entre tanto nombra como rector provisional al Padre José Luis del Palacio, como vicerrector al Padre Antonio Garciandía y como director espiritual al jesuita Miguel Girón Esteso (nacido en 16 septiembre 1926). También en este tiempo se sugiere y se acepta el nombre de Seminario de Vocaciones Adultas "Juan Pablo II", debido a la visita del Santo Padre al Perú. Hasta este momento los seminaristas viven en casas distintas. Monseñor Ricardo Durand, tan paternal como siempre, les dirá que "no se desanimen, están haciendo algo nuevo y muy importante en la Iglesia".

En otra carta, fechada el 28 de junio de 1986, Mons. Durand afirma que mantuvo una reunión con Mons. Antonio María Javierre, Secretario de la Congregación para la Educación Católica; y con Mons. Ripa, quienes se ofrecieron a colaborar si se presentaran problemas en la erección del nuevo seminario. Además, leemos en la carta, que Kiko, Carmen y el Padre Mario son comunicados del hecho de que se había encontrado una casa dónde se establecerían el año entrante, la casa pertenecía a la Sra. Marisa Mujica. La hermana de Carmen Hernández, Elisa Hernández, dio el dinero para comprar dicha propiedad. Kiko promete un equipo formador para el seminario, mientras tanto los estudios se siguen realizando en Santo Toribio y en el Centro Neocatecumenal. En Octubre de 1986 se anuncia que ha sido nombrado un equipo de formadores que llegará en poco tiempo y que, además, serán enviadas familias que ayudarán al seminario y que vivirán en las parroquias. En otra carta, el Obispo del Callao, Mons. Durand anima a seguir adelante en la misión y a no dar mucho oído a las críticas, que aparentemente eran muchas.

Por indicación de Monseñor Antonio María Javierre, entonces Secretario de la Congregación para la Educación Católica, y de Mons. Ripa, minutante de la misma Congregación, se compromete al P. José Luis del Palacio y al P. Antonio Garciandía, quienes con José Pons eran responsables del Camino Neocatecumenal en el Perú. Así, en 1986 se comenzó la formación de dichos candidatos al sacerdocio bajo el cuidado del Excmo. y Rvdmo. Mons. Ricardo Durand Flórez S.J, Arzobispo-Obispo del Callao. En la etapa inicial funge como rector el P. José Luis del Palacio, vicerrector el P. Antonio Garciandía y el P. Miguel Girón, SJ, como director espiritual. Más adelante, se nombran otros formadores más definitivos, el P. Juan José Armendáriz, rector, Ángel Ciriza –vicerrector- y Emiliano Jiménez.

Inicialmente, sólo se impartían en el mismo Seminario las disciplinas filosóficas y estaban a cargo del entonces Rector P. Juan José Armendáriz y el Consejo con los formadores: Ángel Ciriza, Emiliano Jiménez, José Álvarez y José Mari Soler. El primer rector tenía muy marcado su carisma salesiano, especialmente por su dedicación a los jóvenes. Le tocó superar las situaciones típicas de un seminario itinerante, ya que de lunes a viernes los seminaristas y formadores vivían como de prestado en la Casa de Retiro "Betania" -del obispado del Callao- Al llegar el viernes, cada uno se iba a su casa y los formadores a la Casa de Retiros del balneario de Santa Rosa. En este tiempo,los estudios teológicos se hacían en la Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima. En 1986, Mons. Durand erigió el Seminario para Vocaciones Adultas "Juan Pablo II" con 40 seminaristas, que empezó a funcionar en una casa pequeña, pero suficiente, situada en el Distrito de La Punta del Callao (Perú).

Tal como narra Josep Castells[9], miembro de la familia en misión, el seminario constaba desde la entrada del Malecón, la casa y un pequeño patio, al principio el primer seminario establecido ya aquí eran entre treinta y dos muchachos de edades mayores de treinta años porque al principio el seminario se llamó seminario de vocaciones adultas Juan Pablo II debido a la realidad muchos hermanos del camino que sentían el llamado al presbiterado por su historia vocacional. Fue su trayectoria personal lo que provocaba que –al acudir a los seminarios de Lima y del Callao- fuesen rechazados por su falta de estudios u otras situaciones personales alejadas del habitual perfil de los tradicionales seminaristas. Fue esta realidad la que motivó al equipo de itinerantes el formar a los sacerdotes desde otra perspectiva, la de que a través del Camino, la Comunidad un hombre puede llegar a regenerarse. Como escribe el mismo J. Castells "no que siempre has sido así y que nunca vas a cambiar, lo que a nosotros en el camino lo que nos ha llevado a delante es la seguridad, por la historia, de la misericordia de Dios donde el hombre coge esta misericordia el hombre cambia. El hombre no puede cambiar por sí mismo pero Dios si puede cambiar el corazón del hombre y si este hombre acepta este puede ser sacerdote por mucho lo que haya sido anteriormente, porque puede ser santo, porque puede ser cristiano".

Monseñor José Luis del Palacio recuerda con gratitud que la fecha en que llegaron los tres primeros, P. Bernardo Torres, comboniano, P. Antonio Garciandía, en su compañía, fue la del 23 de marzo de 1976, fiesta de Santo Toribio. Los tres presentaron el Seminario Misionero al Cardenal Landázuri por si quería acogerlo en Lima, contestándoles que –aunque él lo veía con claridad- lo pensaría y comentaría con los obispos auxiliares, quienes veían algunas dificultades. También las veían los protagonistas, pero se empezó como con los primeros apóstoles de la primitiva Iglesia, con personas muy pobres humanamente, muy pobres educativamente, pero así se empezó. Estaba claro que antes de la teología y la filosofía, había que poner bien los cimientos de lo que en las universidades medievales sintetizaban en el trivium y cuadrivium; esto es, saber leer, escribir, pensar, apoyo al lenguaje, a la escritura, la comprensión de lectura y primeras nociones de matemáticas. Esto es lo que se hicieron José Mari Soler, profesor de lengua, Jorge Mendaris, profesor de matemáticas, y Ángel Ciriza, filosofía y teología. Ciertamente, todos los testimonios coinciden en señalar que, después de un tiempo, hubo una unidad muy grande. Materialmente estaba todo por hacer pues el recinto era el de una casona que llevaba veinte años sin usarse, sin restaurarse, que era de la familia Mujica Gayo -cuyo dueño había sido embajador en España y era muy amigo de Monseñor Durand; la viuda la donó al Monseñor Durand para lo que él considerase oportuno y él pensó en este seminario de vocaciones adultas cuando después se erigió en Roma el seminario Redemptoris Mater y a partir de allí también el Callao comenzó a llamarse "Seminario Redemptoris Mater y Juan Pablo II". Para no perder esta idea de Juan Pablo II se usó después el de Redemptoris Mater. A finales del año 1989, fecha en que los primeros seminaristas tenían cursos eclesiásticos, llegó Emiliano Jiménez para empezar a dar clases de Teología.

El 12 de diciembre de 1987 son ordenados de diáconos los hermanos Óscar y Daniel Balcázar, actuales sacerdotes incardinados en el Callao. Los tres primeros jóvenes que se ordenaron de presbíteros siendo aún el seminario de vocaciones adultas Juan Pablo II –el 20 de junio de 1989-fueron Daniel Balcázar, Oscar Balcázar y Francisco Iglesias, en Chile. Después -cuando se comenzó a llamar el Seminario Redemptoris Mater y Juan Pablo II- ya con una formación de filosofía y teología –aunque todavía se iba a la Facultad de Lima donde enseñaban, también los profesores del seminario José Mari Soler y Antonio César Molinero. Los tres primeros del ya Redemptoris Mater y Juan Pablo II, el 25 de julio de 1991 fueron Ángel Miranda, Rómulo Vásquez y Manuel Barbará.

El 12 de junio de 1988 llega al Perú como Legado Pontificio al Congreso Eucarístico Bolivariano el Cardenal Ángel Suquía de Madrid, visita el Seminario Juan Pablo II y eso le motiva para pedir uno para su diócesis. Además, inaugura en nombre del Papa la Casa de Convivencias "Juan Pablo II", donde se reúne con el equipo responsable de las Comunidades Neocatecumenales en Perú, mostrando su alegría por la obra que se está llevando a cabo, por la reconstrucción de la parroquia "Nuestra Señora de la Cabeza", y promete colaborar económicamente para seguir restaurando la Iglesia en el Perú.

En los años siguientes el número de seminaristas y de personal destinado a su formación fue aumentando y, al mismo tiempo, se definió con mayor claridad la finalidad propiamente misionera de esta casa de formación presbiteral. De esa forma, en 1989 el Excmo. Arzobispo-Obispo del Callao, a petición de Kiko, Carmen y el P. Mario, consideró oportuno transformar el Seminario para Vocaciones Adultas "Juan Pablo II" en Seminario Diocesano Misionero "Redemptoris Mater y Juan Pablo II", con el objetivo de "formar presbíteros diocesanos para la Nueva Evangelización del Perú, de América Latina y del Mundo", siguiendo los Estatutos y Regla de Vida del Seminario "Redemptoris Mater" de la Diócesis de Roma. 

Hacia 1990 llegó el padre José Álvarez quien apoyó en los cursos de filosofía y teología. El promedio de seminaristas era de 35-40 que vivían de una manera muy precaria porque el comedor era un toldo, antiguo jardín y ahora centro multiusos, con las habitaciones en las que había hasta cuatro camarotes de altura pero como se lee en las crónicas "había una alegría grande, una ilusión de algo nuevo de una manera nueva con un espíritu nuevo".

En octubre de 1990, S.E. Mons. Ricardo Durand, S.J. nombró como nuevo Rector, al P. Ángel Ciriza Aguirre, que hasta entonces había sido Vice-Rector del mismo. A partir de 1992, debido a que el número de alumnos de filosofía y teología era de unos 70 y que también había aumentado el profesorado, se vio conveniente asumir en el mismo Seminario los tratados teológicos. Con ciencia y fervor, se dedicó en cuerpo y alma a su misión que hizo compatible con otros menesteres como la docencia universitaria teológica, la investigación, la pastoral parroquial, hasta que –por un cáncer- partió para el Cielo un 22 de abril del 2005.

Le sucedió el P. Guillermo Colautti, argentino, y, tras varios años, el P. Mario Casalaspro, de Italia.

4. LA FACULTAD DE TEOLOGÍA

En la segunda mitad del siglo XVI, como apoyo a la Primera Evangelización de América, se erigía la primera Facultad de Teología del Perú, corazón de lo que sería después la Universidad Mayor de San Marcos. Su origen se remonta al Estudio General de la Orden de Santo Domingo fundado en 1548. Quinientos años después, y en el marco de la Nueva Evangelización a la que convocó el Siervo de Dios Juan Pablo II, la Congregación para la Educación Católica erigió la segunda Facultad de Teología en el Perú. En efecto, el 28 de octubre de 2004 y con el Decreto Prot. N° 1174/2004, la Santa Sede concedía a la Diócesis del Callao (Perú) la Facultad de Teología "Redemptoris Mater", aprobando a tal fin los Estatutos de la misma y nombrando como Gran Canciller a S.E.R. Mons. Miguel Irizar Campos, C.P., Obispo del Callao, y como primer Rector a S.E.R. Mons. Javier del Río Alba, Obispo Auxiliar del Callao, formado en el Redemptoris Mater del Callao.

La Facultad de Teología "Redemptoris Mater" es fruto del Seminario Misionero y Diocesano "Redemptoris Mater y Juan Pablo II", que comenzó sus actividades en 1985 y que fue erigido por el entonces Arzobispo-Obispo del Callao (Perú): S.E.R.Mons. Ricardo Durand Flórez, S.I. Desde entonces esta institución viene ofreciendo sus servicios a la Iglesia del Perú y a la Iglesia Universal. En ella se forman, sobre todo, seminaristas y sacerdotes provenientes de numerosas jurisdicciones eclesiásticas del Perú y de otros países, así como miembros de institutos de vida consagrada y un grupo, cada vez más numeroso, de laicos. Todos ellos reciben una formación filosófica y teológica caracterizada por la fidelidad al magisterio de la Iglesia y adaptada a las necesidades actuales y con los instrumentos del mundo contemporáneo. Nota peculiar de nuestra Facultad es que toda su labor tiene como punto de referencia constante la Nueva Evangelización que se plantea al hombre de hoy.
En virtud de todo ello, la Facultad de Teología "Redemptoris Mater" del Callao (Perú) ofrece a sus alumnos, además de la formación antes indicada, la posibilidad de optar a los grados y títulos de Bachiller en Filosofía y Bachiller, Licenciatura y Doctorado en Sagrada Teología (Especialidad Evangelización). Además de una serie de Diplomas, Máster y otros ciclos pedagógicos. 

El 24 de enero de 1992, la Conferencia Episcopal Peruana, a petición del Ordinario, reconoció explícitamente los estudios filosóficos y teológicos de nuestro Seminario y el 4 de febrero del mismo año, después de evaluar el plan de estudios, declaró al Seminario Diocesano Misionero "Redemptoris Mater y Juan Pablo 11" como "Centro Educativo de Segundo Ciclo de Educación Superior". El mismo año 1992, el Ministerio de Educación del Perú reconoció y registró a nuestro Seminario en la Dirección General de Educación Superior. La Resolución Ministerial fue ratificada en enero de 1995 por un Decreto Supremo del Presidente de la República, concediendo al Seminario la facultad de otorgar, a nombre de la Nación Peruana, los títulos de Profesional en Ciencias Filosóficas, Profesional en Ciencias Teológicas, Profesor de Religión con título pedagógico, y el Diploma de Competencia para los respectivos estudios. Esta nueva dimensión académica del Seminario exigió la ampliación del local. Para este fin, gracias a Dios, se adquirieron varios inmuebles, entre ellos una antigua casona colindante con el Seminario y calificada como monumento histórico-artístico. Después de restaurarla, obra que mereció la aprobación y el elogio del Instituto Nacional de Cultura, se inauguró como área académica en 1994. El nuevo sector de estudios supuso un aumento considerable en las áreas docentes, así como las de servicios complementarios y en especial la destinada a Biblioteca. En 1994 el Sr. Arzobispo-Obispo del Callao creó la Cátedra "Vaticano II y Nueva Evangelización", cuya finalidad es "el estudio de los temas de mayor actualidad en el desarrollo teológico de la Iglesia, a la vez que difundir la sana doctrina y la obediencia al Magisterio de la Iglesia, contando con la presencia de profesores de prestigio, del país y del extranjero". Desde los inicios de esta Cátedra la dirige el Rvdo. Dr. D. José Luis del Palacio Pérez-Medel.

En 1995 la S. S. Juan Pablo II aceptó, por razones de edad, la renuncia al oficio pastoral de Mons. Ricardo Durand Flórez, S.J. Asumió el gobierno de la Diócesis el hasta entonces Obispo Coadjutor, Mons. Miguel Irizar Campos, C.P., quien confirmó todos los cargos, así como los Estatutos y Regla de Vida del Seminario. 

Un año después la Congregación para la Educación Católica emanó el Decreto de Afiliación del Seminario Redemptoris "Mater y Juan Pablo II" del Callao a la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Urbaniana. En 1998 la Congregación decreta la Afiliación de este Seminario a la Facultad de Filosofía de la misma Universidad, pudiéndose otorgar desde entonces los grados de Bachiller en Sagrada Teología y Bachiller en Filosofía, respectivamente. El día 30 de agosto del 2001 (Solemnidad de Santa Rosa de Lima), la Santa Sede, por medio de la Congregación para la Educación Católica, tuvo a bien erigir el Instituto Superior de Estudios Teológicos "Redemptoris Mater", con la potestad "sui iuris" de otorgar a nombre del Sumo Pontífice los grados y títulos de Bachillerato y Licenciatura en Teología. Para los estudios filosóficos continúa vigente la Afiliación a la Facultad de Filosofía de la Pontificia Universidad Urbaniana de Roma. 

Por otra parte, la sede española del Pontificio Instituto Juan Pablo II para estudios sobre el Matrimonio y la Familia, perteneciente a la Pontificia Universidad Lateranense de Roma, aceptó crear en nuestra sede una extensión del mismo. En consecuencia, se vienen dando los pasos necesarios para que se pueda optar también a los grados de Bachillerato, Licenciatura y Máster en estudios especializados en Matrimonio y Familia.

También en este año, obtiene el doctorado en Teología el P. Javier Del Río, (actual Arzobispo titular de la Arquidiócesis de Arequipa) con la publicación de su tesis: La Iglesia Naciente en el Perú. Aspectos eclesiales y eclesiológicos de la evangelización fundante en tiempos de los primeros concilios limenses (1551 – 1600). Con fecha 30 de Agosto, la Sagrada Congregación para la Educación Católica, firma el decreto por el cual nuestro Centro de Estudios, queda constituido como Instituto Superior de Estudios Teológicos "Redemptoris Mater" del Callao, con potestad para conferir el grado académico de Bachillerato y de Licenciatura en la especialidad de "Teología de la Evangelización". 

El año 2004, En el mes de octubre y por Decreto de la Congregación para la Educación Católica, nuestro Instituto Superior de Estudios Teológicos, pasa a ser Facultad de Teología "Redemptoris Mater". La Facultad de Teología "Redemptoris Mater" quiere ser una institución cultural de primer nivel. Por ello fomenta y colabora en Ciclos de Conferencias, Exposiciones y todas aquellas actividades que ayuden a su fin primario. Cuenta con un nutrido claustro de profesores con una sólida formación, amplia experiencia y adecuada especialización. Sus instalaciones y servicios buscan la funcionalidad y eficiencia de los mismos. Todo ello con el deseo firme de colaborar con la Nueva Evangelización: "No de re-evangelización, pero sí de una Evangelización Nueva. Nueva en su ardor, en sus métodos, en su expresión" (JUAN PABLO II, Alocución en Puerto Príncipe, 9-3-83).

Algunos años después, el 28 de octubre de 2004, Solemnidad del "Señor del Mar" y titular de la Diócesis del Callao, por Decreto Prot. N.° 1174/2004, la Congregación para la Educación Católica erigió la Facultad de Teología "Redemptoris Mater", aprobó sus Estatutos y nombró Rector de la misma a S.E.R. Mons. Javier Del Río Alba, Obispo Auxiliar del Callao. Desde entonces la Facultad de Teología "Redemptoris Mater" viene realizando su misión propia. El Señor ha bendecido esta obra haciéndola crecer en alumnos, profesores e instalaciones. 

Le seguirá como rector el P. Antonio César Molinero Espadas y en la actualidad el P. Carlos Elías Echevarría[10]

Estos acontecimientos, han coincidido en el tiempo, con la partida para el Cielo de su principal benefactor, el Papa San Juan Pablo II, y la alegría de recibir a su sucesor, Su Santidad Benedicto XVI. El 21 de agosto toma posesión como Arzobispo de Arequipa, el hasta entonces Obispo Auxiliar del Callao, Javier Del Río Alba.

Este mismo año, del 6 al 9 de noviembre, se celebra el I Congreso Teológico Internacional, inaugurado por el Cardenal de Lima Juan Luis Cipriani y con la bendición por parte del Nuncio Apostólico Rino Passigato, de la estatua del Siervo de Dios Juan Pablo II que preside los claustros de la Facultad.

El 12 de diciembre de 2011, Su Santidad Benedicto XVI nombró nuevo Obispo del Callao a S.E.R. Mons. José Luis del Palacio Pérez-Medel, quien era miembro del Comité de Dirección y Catedrático de esta Facultad. En virtud de dicho nombramiento asumió sus funciones de Gran Canciller de la Facultad de Teología Redemptoris Mater. El día 7 de enero, en la Catedral de Sta. María la Real de la Almudena, recibió la Ordenación Episcopal de manos del Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Mons. Antonio María Rouco Varela, Arzobispo de Madrid y Presidente de la Conferencia Episcopal Española; concelebraron el Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Dr. D. Antonio Cañizares Llovera, Prefecto de la Congregación para el culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos y arzobispo de Valencia en la actualidad, el Excmo. y Rvdmo. Mons. Dr. Paul Josef Cordes y un nutrido grupo de obispos de las Conferencias Episcopales española y peruana. El día 22 de enero del 2012, en la Iglesia Matriz del Callao, tomó posesión de la diócesis del Callao, Mons. José Luis del Palacio Pérez-Medel, acompañado del Sr. Cardenal de Lima y Primado del Perú, Mons. Juan Luis Cipriani Thorne, Mons. Miguel Cabrejos, Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana y Arzobispo de Trujillo, además de numerosos arzobispos, Obispos, autoridades eclesiásticas, civiles y militares. 

Se inició el año académico 2012 el 20 de marzo. La inauguración dio comienzo con la celebración de la Eucaristía presidida por el Sr. Nuncio de Su Santidad en el Perú, Mons. James Patrick Greem acompañado de Mons. José Luis del Palacio Pérez-Medel, Obispo del Callao y Gran Canciller de la Facultad de Teología Redemptoris Mater, Mons. Lino Panizza Richero, Obispo de Carabayllo y Secretario de la CEP, Mons. Miguel Irizar Campos, Obispo emérito del Callao y Mons. José Ignacio Alemany Grau, Obispo emérito de Chachapoyas. También asistieron, Vicarios Generales, Consejo de Dirección, Rectores de varios Seminarios, Autoridades civiles y militares, profesores, alumnos y personal de la Facultad de Teología Redemptoris Mater. Acabada la Eucaristía tuvo lugar el acto académico. Además de recordar las efemérides del año 2011, el Rvdo. Dr. D. Carlos Elías Echeverría Bouche, Doctor en Derecho Canónico y Vice-Rector de la Facultad Teológica Redemptoris Mater, expuso la lección inaugural, sobre el tema: "La preparación al matrimonio en el mundo actual". Después de la entrega de los títulos a los alumnos, el acto académico se clausuró con las palabras de exhortación del Gran Canciller y la inauguración oficial del curso.

El servicio cultural se vio enriquecido el pasado año con: exposiciones, simposios, conciertos, conferencias, etc.; de todas estas actividades señalamos sólo algunas: 

El 20 de agosto, el Excmo. y Rvdmo. Mons. Javier Del Río Alba, Arzobispo Metropolitano de Arequipa, con la conferencia: "Naturaleza y funciones de las universidades Católicas según la Ex Corde Eclesiae". El 21 de agosto, el Dr. José López Guzmán, impartió la conferencia: "Importancia de la bioética". El 14 de septiembre, el Rvdo. P. Fabián Ramos, Licenciado en Derecho Canónico y profesor de la Universidad Eclesiástica San Dámaso de Madrid, dio la conferencia: "La libertad religiosa". El día 17 de octubre, el Rvdo. Dr. D. Juan Pablo Rubio, O. S. B. Doctor en Sagrada liturgia y director del coro del monasterio del Valle de los Caídos, dio la conferencia: "la música sacra a los 50 años del Concilio Vaticano II y su influencia en la nueva evangelización". 

Del 3 de octubre al 16 de noviembre tuvo lugar la V EXPOSICIÓN ETNOGRÁFICA Y MISIONERA: "¿Existen los ángeles?", que se inauguró con una Eucaristía presidida por el Rvdo. Dr. D. Oscar Balcázar, Vicario de la Diócesis del Callao. Durante el tiempo que estuvo expuesta, fue visitada por más de tres mil personas, y se impartieron las siguientes conferencias: La profesora Mª Encarnación Hernando Fraile, antropóloga: "Los Ángeles según el Catecismo de la Iglesia Católica". El Rvdo. Dr. D. Carlos Elorriaga Planes: "La realidad de los ángeles y los demonios". El Rabino Guillermo Bronstein: "Los Ángeles en el mundo hebreo". La Licenciada en Astro-Física, Janett Karin Rimachi Gálvez: "¿Se puede hablar de los ángeles, desde la ciencia, la razón y la fe?". 


Un lugar destacado en esta memoria, debe ocupar la celebración del III CONGRESO TEOLÓGICO INTERNACIONAL, celebrado del 3 al 6 de diciembre en el Coliseo "Miguel Grau" del Callao; trató el tema: "Fe y Nueva Evangelización". Se inscribieron unas 3. 800 personas, entre las que se encontraban las siguientes personalidades que intervinieron como ponentes en el Congreso: Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Dr. D. Antonio Cañizares Llovera, Prefecto de la Congregación para el culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos (Roma). Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Dr. D. Juan Luis Cipriani Thorne, Arzobispo de Lima y Primado del Perú. Excmo. y Rvdmo. Mons. Dr. D. José Luis del Palacio Pérez-Medel, Obispo del Callao. Excmo. y Rvdmo. Mons. Dr. D. Javier Del Río Alba, Arzobispo de Arequipa. Excmo. y Rvdmo. Mons. Dr. D. José Manuel Lorca Planes, Obispo de Cartagena (España). Rvdo. Dr. D. Silverio Nieto, Doctor en Derecho Civil y Derecho Canónico por la Universidad Complutense de Madrid (España) poseedor de la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort, ex magistrado y director del Servicio jurídico civil de la Conferencia Episcopal Española, Rvda. Madre Dra. Theresa Brenninkmeijer (Dina-marca), Abadesa del Monasterio Cisterciense de Pachacutec (Callao). Ilmo. Dr. D. José Luis Mendoza Pérez, Presidente de la Universidad Católica de San Antonio de Murcia y su esposa, Ilma. Sra. Dª. María Dolores García Mascarell (España). 

Esta facultad celebró también del 3 al 6 de diciembre, la III SEMANA DE TEOLOGÍA, que tuvo como ponente, al Rvdo. Dr. D. José Alberto Cánovas, Vice-Rector de la Universidad Católica San Antonio (Murcia); el tema desarrollado fue: "La evangelización en el nuevo contexto cultural". 

El 7 de diciembre, la Facultad de Teología Redemptoris Mater, concedió en solemne acto académico, la investidura como Doctor Honoris Causa a los Ilmos. Sres. Dr. D. José Luis Mendoza Pérez y Dª. María Dolores García Mascarell. Los doctorandos fueron recibidos en la Facultad por sus padrinos: Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Dr. D. Antonio Cañizares Llovera, y el Excmo. y Rvdmo. Mons. Dr. D. Javier Del Río Alba. El discurso de bienvenida, en nombre de la Facultad, estuvo a cargo del Rector de la Facultad Rvdo. Dr. D. Antonio César Molinero Espadas. La Laudatio Académica de los nuevos Doctores Honoris causa, estuvo a cargo del Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Dr. D. Antonio Cañizares Llovera y la Lectio Magistralis por el Ilmo. Sr. D. José Luis Mendoza Pérez y la Ilma. Sra. Dª. María Dolores García Mascarell. El discurso de bienvenida al Claustro de los nuevos Doctores, estuvo a cargo del Excmo. y Rvdmo. Mons. Dr. D. Javier Del Río Alba, Arzobispo de Arequipa, y el de clausura por el Excmo. y Rvdmo. Mons. Dr. D. José Luis del Palacio Pérez-Medel, Obispo del Callao y Gran Canciller de la Facultad de Teología Redemptoris Mater. Se recordó de un modo especial, al que fue profesor de esta Facultad, el Dr. Enrique Torres Llosa, que partió a la casa del Padre; y se celebró una emotiva Eucaristía de agradecimiento a Dios por su presencia entre todos.

CONCLUSIÓN

Cabe señalar como contundente fruto la formación de unos 120 presbíteros egresados del Seminario. Por último, me remito a una de las pocas fuentes escritas sobre el particular, la "Entrevista a S.E.R. Mons. José Luis del Palacio Pérez-Medel. El seminario Redemptoris Mater y Juan Pablo II del Callao". Concluye haciendo una valoración de los frutos y relevancia del Seminario para el Camino, la diócesis del Callao y la Iglesia peruana:

"El Camino Neocatecumenal sin presbíteros que celebren la liturgia no se pude seguir. Así que los primeros beneficiados han sido sus miembros. Después, ante la insistencia de los obispos diocesanos, hemos tenido que ayudar a sus seminarios diocesanos. Así ha sido en Yurimaguas, Ayacucho, Huacho, Arequipa y Piura. Estos seminarios los llevaba un equipo del Seminario Redemptoris Mater y Juan Pablo II. Los seminaristas hacían la filosofía en su diócesis y después la teología en la Facultad de Teología Redemptoris Mater del Callao. Por tanto, he visto que las iglesias locales se han beneficiado enormemente" [11].




[1] Este artículo se inició como tarea de clase por parte de tres alumnos del curso de "Historia de la evangelización de América" (Miguel J., Renzo I., Pedro Duarte), quienes han realizado entrevistas a personas que, de una u otra forma, tuvieron que ver con el Seminario. Como fuente de datos se han utilizado algunas copias de cartas escritas por Mons. Ricardo Durand, Obispo del Callao desde 1975 hasta 1995.Algunos de los entrevistados son hoy presbíteros que se han formado en este seminario, sacerdotes que han sido enviados a fines de los 80 al Perú para servir en el equipo de formadores, familias que han colaborado con esta nueva realidad diocesana, hermanos de las Comunidades Neocatecumenales que ayudaron desde los inicios y otros que hoy lo siguen haciendo.
[5] Cfr. cann. 232-272 C.I.C. e 331-366 C.C.E.O
[6] Cfr. CONGREGACIÓN PARA LA EDUCACIÓN CATÓLICA, Ratio fundamentalis institutionis sacerdotalis, 19 marzo 1985, nn. 20-101
[7] JUAN PABLO II, exhort. apost. Pastores dabo vobis, n. 68.
[8] Art. 18 [Iniciación y formación a la vocación sacerdotal]http://www.martinez-abad.es/sagradafamilia/estatuto.htm
[9] Nacido en pueblo de Barcelona, casado con María Mercedes Prad, con tres hijos, enviado el 22 de enero de 1988 en el encuentro del Valle de los Caídos `por el Cardenal Suquía, y el 12 de junio por el Papa Juan Pablo II, en compañía de cuatro familias enviadas al Ecuador y a Chile, el 17 de junio de 1988 llegamos a Lima. Primero estuvieron dos meses en la casa de convivencias "Juan Pablo II" en el distrito de Santa Rosa (Ancón), porque aún no había un lugar donde se pudiera ir, ya que estaban destinados al pueblo joven Fundo Márquez, donde llegaron el 24 de setiembre, día de la virgen de la Merced, y se establecieron al lado de la parroquia en un CEO, por espacio de tres años.
[11] Mayo 2015, Alejandro Secades Gómez. Revista Catechumenium 24, Lima, 2014, 95-100

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