domingo, 24 de mayo de 2020

Parroquias y barrios de las periferias transformados por las comunidades en misión

Las comunidades en misión son una nueva forma de evangelización que nació para las primeras comunidades del mundo en Europa, antes las dificultades que están atravesando muchas parroquias por falta de fieles que ayuden a llevar a cabo la misión de la Iglesia desde el ámbito parroquial. El Papa Benedicto XVI fue el primer Pontífice en querer y promover este nuevo tipo de misión enviando en 2009 las primeras comunidades de Roma a las periferias. Desde entonces han sido decenas las comunidades que han terminado el Neocatecumenado las que han sido enviadas por los Obispos desde sus parroquias de origen a zonas de las grandes ciudades más descristianizadas, donde el párroco él solo difícilmente podía llevar adelantes las diferentes pastorales.

Realizar este tipo de misión no es fácil, pues a menudo los hermanos se encuentran con grandes dificultades que superar: por la distancia respecto a sus domicilios, de tipo social, económico, de rechazo... estas comunidades no van a conquistar, sino a servir, y en la medida que sirven, es decir, que como el grano de mostaza mueren, da fruto, y en algunos casos abundante. Traemos la experiencia de una Parroquia en un barrio obrero de Madrid, transformada en pocos años por el párroco y estas comunidades que le ayudan.

Padre de 13 hijos, da su experiencia como familia misionera

Juan Ricart tiene 38 años, y acaba de tener el 13 hijo. Es de Barcelona, España, y hace 16 años se casó con Cecilia Goday, procedente de Madrid. A los pocos años de casados se levantaron como familia en misión, y fueron destinados por sorteo a Barnaúl, una ciudad siberiana de Rusia. Tras 5 años en Rusia, por cuestiones administrativas, les fue denegada la residencia y tuvieron que marchar, acabando, tras discernirlo con detenimiento, en Santiago de Chile, donde han estado otros 5 años. Finalmente salieron de Chile y en una convivencia internacional de familias fueron destinados a Riga, Letonia, donde han permanecido un año. En este vídeo reciente Juan Ricart da su testimonio como familia numerosa y misionera a un grupo de jóvenes chilenos. 

En el vídeo se da respuesta a muchas inquietudes y cuestiones que surgen entorno a estas familias y que no pocas veces son signo de contradicción, más en el mundo actual que ha elevado y divinizado el  'bienestar': ¿Como nace la llamada? ¿porqué dejan todo y parten a un país extraño? ¿como sobreviven? ¿cómo lo viven sus hijos el desarraigo? ¿qué tipo de misión realizan? ¿cuanto tiempo están en misión? Si quieres conocer esta increíble experiencia entra puedes verla en el siguiente enlace de you tube.