domingo, 3 de octubre de 2021

Kiko Argüello, reconocido por ser «punta de lanza» en las relaciones entre la Iglesia y el judaísmo

La Universidad Francisco de Vitoria de Madrid, centro católico que cuenta con más de 8.000 alumnos, ha decidido investir como Doctores Honoris Causa al coiniciador del Camino Neocatecumenal, Kiko Argüello, y al gran rabino David Rosen. Tal y como informa esta institución el acto se celebrará el próximo 25 de octubre a las 19.00.

Este será el cuarto doctorado honoris causa que recibirá Argüello, responsable internacional de uno de las realidades eclesiales más dinámicas e importantes actualmente en la Iglesia Católica.

En 2009, lo recibió por el Pontificio Instituto Juan Pablo II por la contribución del Camino Neocatecumenal en la defensa de la familia cristiana. En 2013, junto a Carmen Hernández fue investido Doctor Honoris Causa en Teología por la Universidad Católica de América, en Estados Unidos. Pocos días después lo eran en la Universidad Católica de Lublin, en Polonia.

A sus 82 años y con un estado de salud frágil tras haber sufrido Covid-19, lo que le obligó a ser hospitalizado, este reconocimiento de la Universidad Francisco de Vitoria viene a avalar el importante papel que el Camino Neocatecumenal en el acercamiento entre la Iglesia Católica y el judaísmo.


Las familias cristianas deben vivir en comunidades pide Mons. Reig Plá

El obispo de Alcalá de Henares, Mons. Reig Pla, ha publicado una extensa pero también certera carta pastoral titulada Caminar juntos siguiendo fielmente a Cristo y a la Iglesia. En ella hace un repaso a la situación de la sociedad y de la Iglesia, de los ataques que viven las familias cristianas y las armas que éstas deben portar para defenderse, y que en el fondo repercute en el bien de la propia Iglesia.

En su carta el Obispo indicaba algo que recuerda enormemente lo que se está dando en el Camino Neocatecumenal, que desde hace 50 años está iluminando, y ahora se visibiliza de un modo patente, la necesidad de vivir la fe en pequeñas comunidades para poder resistir el ambiente anti-cristano que nos envuelve: "estas familias cristianas y estos nuevos sujetos cristianos necesitan a su vez del hábitat de la pequeña comunidad que se va formando con el Catecumenado. Si no es así, la respuesta a una cultura hedonista invasiva no se hace posible. Con ello, lo que quiero decir es que las familias deben agruparse entre ellas, generar pequeños grupos y comunidades donde se cree un ambiente propicio para la educación en el amor"